Año: 2002
Título original: The Ring
Duración: 118 min
Nacionalidad: Estados Unidos
Director: Gore Verbinski
Intérpretes: Naomi Watts, Martin Henderson, David Dorfman, Brian Cox
Distribuidora: UIP

Si partimos de la premisa de que se trata de un film de tensión más que de terror, se puede considerar que con The Ring (la adaptación americana del film japonés del mismo título), se ha sabido mantener fiel el espíritu de la versión original (cosa que no pueden decir otras versiones de películas no estadounidenses) y han acertado al acortar con bastante buen criterio la dinámica nula de la versión japonesa, planos eternos, explicaciones inútiles a aspectos ya claros de por si, y reiteración de diálogos y situaciones que no aportan nada. (Por cierto, gran decepción con la segunda parte japonesa.)

La trama de la versión americana es idéntica a la original. Comienza como cualquier película de terror de adolescentes: dos chicas comentando una leyenda urbana alrededor de una cinta de vídeo maldita. Quien la ve, recibe una llamada que le informa de que le quedan siete días de vida, y tras ese periodo de tiempo, muere sin que nadie pueda evitarlo.

Una periodista se interesa en el asunto, cuando una familiar fallece en extrañas circunstancias y comienza una investigación sobre el caso, remitiéndole sus pesquisas a la cinta maldita y descubriendo el fondo real de esa leyenda. Todo se complica cuando cree haber encontrado dicha cinta. Momento en el que comienzan las dudas alrededor de la veracidad del relato, y de la conveniencia o no de ver lo que hay grabado.

En cuanto al resultado de la película, bueno; han convertido al hijo de la protagonista, en la original un secundario y poco desarrollado personaje, en un niño atormentado, solitario y superdotado, un personaje muy en la línea Sexto sentido (ojeras incluidas) con pseudopoderes precognitivos, que da una subtrama interesante al film, añadiendo un tono más sobrenatural al resultado. También se ha aderezado el metraje con otra subtrama donde los caballos tienen un papel importante... Que realmente pasa sin pena ni gloria por la película, y no aporta absolutamente nada, a excepción de una secuencia totalmente bochornosa y prescindible en un barco que hace desmerecer lo conseguido hasta ese punto.

Se han modificado los parámetros de la original con mas o menos aciertos, pudiendo así añadir unos efectos especiales que si bien aquélla no tenía, han favorecido que secuencias de terror psicológico donde uno imagina mas que ve, aquí se convierten en un espectáculo repulsivo que no deja lugar a la imaginación.

Pero eso sí, el film mantiene un pulso tenso durante todo su metraje, principalmente gracias a una B.S.O. efectiva y muy sobrecogedora, perfectamente sincronizada con los "sustos" habituales y una trama donde los personajes se van definiendo en torno a una tragedia donde no existe un personaje malvado, ya que todos tienen sus propios dramas y defectos, y que, si bien tiene un par de escenas que chirrían de pura incongruencia, (cosa que con todos sus defectos no tiene la versión nipona), entretiene al espectador, lo que no consiguen muchas producciones actuales, y es ideal para pasar un mal rato, aunque se prefiera con mucho el final japonés.

Iván Ledesma