Como todo el mundo sabe, la Navidad en EE.UU. es otra cosa. Allí el período navideño se vive con mayor pompa que en el resto del planeta; tiene su propia liturgia, ésa que tan bien ha sabido exportar al resto del mundo a través del cine y la televisión. La habitual colección de clichés que llenan las películas hollywoodienses, fiel reflejo del "american way of life", está representada al completo en esta colección de cuentos navideños de Connie Willis. El espíritu de la Navidad recoge seis relatos publicados en tan señaladas fechas en la revista Isaac Asimov's Magazine a lo largo de los 90, más dos nuevas aportaciones escritas por la célebre autora para la ocasión. Salvo una de las novedades, "La garra del gato", en la que la Navidad es un mero decorado de fondo, todos son exactamente lo que parecen: cuentos navideños. Aunque eso sí, con la fantasía y la ciencia-ficción siempre presentes.
Todas las pequeñas tradiciones que conforman esa empalagosa época del año están incluidas en la antología. Tiendas de juguetes repletas de niños, apresuradas y masificadas compras en grandes almacenes, la nieve, los boletines de noticias, los regalos del Santa Claus secreto, el muérdago, el pastel de calabaza y hasta los mismísimos personajes del mito cristiano. Y, por supuesto, Dickens. Un conjunto de tópicos que inciden decisivamente en los argumentos y conforman un único decorado, situado curiosamente en un entorno actual y urbano. Cosa extraña en una autora que gusta de recrear ambientes de época en sus novelas.
En cuanto a los variados argumentos, Willis ofrece lo que en ella es habitual: historias inteligentes repletas de humor cotidiano, pero cargadas de intención, de la fina ironía que la autora tan bien domina. Historias de gentes sencillas narradas de forma variada, con una riqueza de estilo propia de una gran escritora: indistintamente en primera o tercera persona, en masculino o femenino, con una profusión de personajes que de tan humanos nos resultan familiares. Seres pomposos y mezquinos, hipócritas y egoístas, pero también generosos y repletos de bondad.
La colección, en todo caso, logra una diversidad temática difícil de conseguir. Una comedia navideña a lo Capra; el juego del escondite con ilustres protagonistas, trasladados en circunstancias extrañas al presente; un Scrooge moderno castigado en una claustrofóbica historia; la tristeza inherente a la Navidad en una extravagante adaptación dickensiana; un cuento detectivesco con un final rompedor; ladrones de cuerpos que mejoran a sus víctimas; además de "El poni", la única nota negativa en esta antología, son suficiente muestra de la fértil imaginación que posee la mejor autora actual en el género.
A lo anterior hay que sumar un relato que se debe presentar aparte debido a su inmensa calidad. "Epifanía" es una de las dos novedades y un cuento realmente importante, una lectura extraordinariamente original de la Segunda Venida de Cristo, que aun siendo fiel a las profecías exime a la Humanidad del tan temido Apocalipsis. Un auténtico ejemplo, también, de lo que puede suponer la ambientación en el desarrollo de un cuento.
El volumen concluye con un regalo de la autora: doce recomendaciones de libros y otras doce de películas, relacionados todos ellos con la Navidad. Un detalle más que convierte a esta recopilación de cuentos en un libro altamente recomendable gracias a una alta calidad que ni siquiera logra oscurecer el incomprensible cambio del título original -totalmente adecuado en nuestro idioma- por otro redundante y sin sentido.
Santiago L. Moreno
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