Siguiendo con el impulso que le ha dado a Minotauro su adquisición por parte de Planeta, se nos presenta esta antología de cuentos de la famosa serie de Ursula K. Le Guin. La serie de Terramar a pareció hace ya años y sorprendió cómo la autora era capaz de tomar el material básico de Tolkien (magos, dragones, reinos misteriosos, cánticos y hasta mapas) y crear algo original y sorprendente que el desarrollo de la magia de Terramar no ha sido superado por ningún otro autor y el excelente estilo de su prosa hace que la serie sea una de las mejor escritas del subgénero (a riesgo de ser desterrado al vacío, en mi opinión esta serie es bastante superior a El Señor de los Anillos). La serie finalizó tras cuatro volúmenes en los que empezaba a dar señales de agotamiento, pero Le Guin siguió escribiendo cuentos ocasionales ambientados en este mundo y que ahora aparecen en este libro. Esta antología consta de cinco cuentos y de una suerte de apéndices de Terramar y habría dos formas de comentarla: individualmente o como parte de la serie.
Por sí mismos, los cuentos son correctos, están mejor escritos que la mayor parte de las series de fantasía y son entretenidos, aunque quizás se pasan de longitud (de hecho, éste es el volumen más largo de la serie). Está claro que Le Guin es una de las mejores escritoras en este subgénero de fantasía épica y consigue que los personajes sean interesantes y sus peripecias entretenidas. La descripción de ambientes es buena y las tramas están bastante logradas. En general, en cualquiera de los cuentos se tiene la sensación de que Terramar es un mundo vivo en el que suceden cosas sin que tengan que intervenir los protagonistas y la magia es algo vibrante y misterioso.
Por otra parte, los cuentos tienden a ser un tanto repetitivos: El tema de cómo un joven mago (o aspirante a mago) con gran potencial afronta la vida y alcanza la madurez se repite en la mayoría de los cuentos. Este es el esquema en el que se basa "El descubridor" que además es tan largo que se puede considerar una novela corta; si a este argumento le añadimos una historia de amor tenemos "Rosaoscura y Diamante"; si se enfoca en la relación maestro-alumno tenemos "Los Huesos de la Tierra"; y si el aprendiz de mago es una mujer tenemos "Dragonvolador". La teórica excepción sería "En el corazón del pantano", que trata sobre cómo un mago con su potencial alcanzado expía sus pecados, lo cual tampoco es demasiado original.
En relación con los otros volúmenes, destaca el hecho de que los cuentos no aporten nada nuevo a la serie. Los cuentos básicamente vuelven a contar la misma historia que Un mago de Terramar con florituras diversas. Caso aparte es el último cuento, "Dragonvolador", que además de esto, riza más el rizo tratando de reabrir la serie y con un final al que sólo le falta el continuará, lo cual es bastante frustrante después de leer una serie que había quedado completamente cerrada. Los cuentos están bien como introducción a la serie, pero yo recomendaría dirigirse directamente al primer libro.
Respecto a los Apéndices, básicamente consisten en una recopilación de datos aparecidos a lo largo de la serie con algunos añadidos siguiendo el estilo inaugurado por Tolkien en su serie de la Tierra Media y realmente no aportan nada de interés salvo para los más fanáticos seguidores de Terramar (que supongo que los habrá). Es más, da la impresión de que anuncian la temida conversión de la serie en franquicia; de hecho, en el prólogo ya se nos anuncia una nueva novela que bien pudiera ser una nueva serie, espero que por lo menos con nuevos personajes.
El resultado final es un libro ameno y bien escrito pero un tanto repetitivo y que no aporta nada a la serie, sino que más bien la desdibuja.
Alberto Martín de Hijas Liste
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